Lo que aprendí con la IA es que puede ser una herramienta muy valiosa para generar ideas, aclarar conceptos y organizar información de manera más rápida y estructurada. Sin embargo, también descubrí que no basta con recibir la respuesta tal cual, sino que es necesario leerla con atención, analizar si es correcta y completarla con ejemplos o referencias.
En este proceso puse en práctica habilidades como el pensamiento crítico, la capacidad de síntesis y la redacción con mis propias palabras. La IA me ayudó a ahorrar tiempo en la búsqueda inicial de información y me dio una base sobre la cual construir un contenido más completo y adaptado a mis necesidades.