Fine Line – Harry Styles»Conexiones intergeneracionales y desarrollo familiar no heteronormativo»

Las familias, como organismos vivos en constante evolución, atraviesan un proceso de transformación a lo largo de su existencia. Este proceso, conocido como ciclo vital familiar, está marcado por una serie de etapas y transiciones que determinan en gran medida la dinámica y el desarrollo de sus miembros.

El ciclo vital familiar es un concepto intrínseco para comprender el desarrollo y la evolución de las familias a lo largo del tiempo. Se ha analizado desde diversas perspectivas, siendo algunos de los enfoques más prominentes los propuestos por Geyman (1948)* , Duvall (1977)**, Carter y McGoldrick (1980)***, así como la visión sistémica de la Organización Mundial de la Salud (OMS) (2018)***. Estos modelos proporcionan un marco teórico valioso para los profesionales de la salud, permitiéndoles entender las dinámicas familiares y ofrecer un mejor apoyo tanto a nivel individual como familiar.

Sin embargo, estos modelos a menudo pasan por alto la diversidad de experiencias familiares en la sociedad contemporánea. Por ejemplo, la dinámica de las familias homosexuales, que pueden no seguir el patrón tradicional de matrimonio y procreación, no siempre se refleja completamente en estos modelos. Familias que optan por no tener hijos, que enfrentan dificultades para concebir o que se enfrentan a restricciones legales o sociales para adoptar o recurrir a la subrogación también quedan fuera del alcance de estos enfoques convencionales y que representan realidades cada vez más comunes que no se ajustan a estos esquemas.

Por lo anterior es necesario llegar a dos puntos fundamentales: 1. reconocer que el concepto de familia ha evolucionado significativamente en las últimas décadas. Más allá del modelo heteronormativo de la familia nuclear y que emergen nuevas estructuras familiares y 2. la necesidad de desarrollar modelos explicativos adaptados que consideren la diversidad de las familias contemporáneas, familias monoparentales, familias adoptivas, familias reconstituidas y otras configuraciones no tradicionales también experimentan etapas de desarrollo y enfrentan desafíos y crisis que merecen se ofrezcan herramientas de atención, acompañamiento y apoyo.

Es fundamental para los profesionales de la salud y para la sociedad en su conjunto considerar las implicaciones de esta diversidad familiar. ¿Cómo afectan estas diferentes dinámicas familiares a la salud y al bienestar de sus miembros? ¿Cómo pueden los sistemas de apoyo y los servicios de salud adaptarse para satisfacer las necesidades específicas de estas familias?

Los invito a reflexionar sobre las crisis normativas y no normativas que pueden experimentar las familias que no se ajustan a los modelos tradicionales del ciclo vital familiar. ¿Cuáles creen que son los principales desafíos que enfrentan estas familias? ¿Qué tipo de apoyo necesitan? ¿Cómo podemos desarrollar modelos más inclusivos y comprensivos que aborden la complejidad de las familias contemporáneas?

*Modelo de Geyman: Este modelo se centra en la formación y expansión de la familia, pasando por etapas como la formación de la pareja, el nacimiento de los hijos y su independencia.

**Modelo de Duvall: Propone ocho etapas que abarcan desde la formación de la pareja hasta la vejez, enfatizando en los cambios en las relaciones familiares y las tareas de desarrollo a partir del nacimiento y desarrollo de los hijos.
*** Modelo de Carter y McGoldrick: Se caracteriza por su enfoque sistémico, considerando a la familia como un sistema en constante interacción con su entorno. Define cinco etapas que van desde la diferenciación del yo hasta la muerte de un miembro.
***Modelo de la OMS: Este modelo, más reciente, a pesar de reconocer la diversidad de las familias y de proponer un enfoque basado en las necesidades y desafíos específicos de cada etapa, no plantea claridades sobre las crisis y etapas del desarrollo de tipologías especificas.
Recommended19 dieron "Me gusta"Publicado en Psicología

Autor del blog

Comentarios

  1. Ada Maria Toncel.
    Joaquin Cabana,
    Leider Vargas.

    El blog nos resultó interesante e innovador pues muestra y cuestiona como los modelos tradicionales de ciclos vitales familiares solo explican las crisis de las familias heterosexuales con hijos, además nos presenta una perspectiva más amplia en la que se incluye otro tipo de familias diversas.

    A continuación, expondremos las posibles crisis normativas y no normativas de una familia heterosexual que no desea tener hijos:

    CRISIS NORMATIVAS.
    – Adaptación marital.
    – Presión social.
    – Expectativas familiares.
    – Adopción de una mascota y adaptación a esta misma.
    – Muerte de su mascota.
    – Decisión de tener o no otra mascota.
    -Crecimiento profesional y personal.
    -Jubilación profesional.

    CRISIS NO NORMATIVAS.
    – Desajustes o confrontaciones por los roles de género.
    – Embarazo no deseado/ aborto.
    – Arrepentimiento a una edad avanzada de uno o ambos miembros de la relación por no tener hijos.
    – Infidelidad por parte de uno o ambos miembros de la relación.
    – Enfermedad o muerte de uno de ellos.

    Evolución familiar:
    Consideramos que la evolución de este tipo de familia dependerá de distintos factores, siendo quizás, internos: las características dentro de la relación tales como la comunicación, la confianza, el trabajo y esfuerzo constante de parte de ambos para la relación. Y externos: como el contexto social influye dentro de la relación, los temas culturales, las crisis no normativas que podría experimentar la pareja.

    Iniciaría con la adaptación y convivencia entre ellos, regular las normas y roles de cada uno dentro del hogar y la relación, así como el acuerdo de valores y principios en común; luego, la afirmación o reafirmación de la disposición de ambos sobre los hijos.
    Este tipo de familia podría enfrentarse a las expectativas sociales sobre los hijos y la presión al no ceder a ello, además del señalamiento y el desacuerdo social al decidir adoptar una mascota.
    Otro suceso importante sería la creación de redes emocionales y sociales como familia.
    Vivir el duelo por la perdida de su mascota, acá quizás haya conflictos por la forma de sobrellevar esto o una reafirmación al vinculo entre ambos, y la decisión sobre la posibilidad de volver a adoptar otra mascota en un futuro inmediato, mediano o largo.
    El crecimiento y desarrollo de ambos en ámbitos profesionales, sociales, personales y familiares.
    Preparación sobre el futuro y planificaciones financieras y/o sociales.
    Inclusión de nuevas rutinas o sostén de las ya establecidas.
    Jubilación y la plenitud o arrepentimiento de uno o ambos por la decisión sobre los hijos.

  2. 1. La familia que escogimos para describir el ciclo vital familiar es la heterosexual que no puede tener hijos.

    Crisis normativas: Matrimonio, expectativas de la sociedad sobre ellos, la paternidad y el diagnóstico.

    Crisis no normativas: Infertilidad, decisión de adoptar o no, presión social por parte de su círculo cercano y más, tratamientos de fertilidad, depresión, ansiedad, sentimientos de culpa al no poder concebir.

    2. Las posibles evoluciones que podría tener esta familia son: La opción de adoptar niños, decisión de posible fertilización in vitro, vientre de alquiler, adopción de una mascota o la decisión de quedarse sin hijos.
    Integrantes: Andrea Delgadillo, Luisa Meza y Sharay Gomez

  3. el texto promueve una perspectiva necesaria para la comprensión y el apoyo a las familias en la sociedad contemporánea, con un enfoque más inclusivo y adaptativo en los modelos de ciclo vital familiar. Este enfoque es vital para responder de manera efectiva a las realidades y necesidades de todas las familias, independientemente de su estructura.

    Crisis normativas y no normativas para una familia homosexual que no desea tener hijos
    Las familias homoparentales sin hijos, al igual que cualquier otro sistema familiar, transitan por una serie de etapas a lo largo de su ciclo vital, cada una con sus propios desafíos y oportunidades. Desde una perspectiva sistémica, podemos analizar en profundidad las crisis normativas y no normativas que estas familias pueden enfrentar, así como su probable evolución, considerando ejemplos concretos y ampliando los detalles de cada aspecto.

    Crisis Normativas

    -Adaptación a la vida en pareja: Como en cualquier pareja, habrá una fase de adaptación inicial donde ambos miembros aprenden a vivir juntos, compartir responsabilidades y gestionar las diferencias.

    -Aceptación social y familiar: La aceptación y apoyo por parte de las familias de origen y el entorno social pueden ser un desafío, especialmente en contextos donde la homosexualidad aún no es completamente aceptada.

    -Establecimiento de roles: Definir y acordar roles dentro de la relación, como las responsabilidades económicas, las tareas del hogar y la gestión del tiempo libre.

    -Manejo de la salud sexual y Emocional: Asegurar una comunicación abierta sobre la salud sexual y emocional para mantener una relación saludable y satisfactoria.

    -Crecimiento profesional y personal: Apoyarse mutuamente en el desarrollo de carreras profesionales y en la consecución de metas personales.

    -Desarrollo de una red de apoyo: Construir una red de amigos y aliados que brinden apoyo emocional y social.

    -Planificación financiera para la jubilación: Asegurar estabilidad económica para la vejez.

    -Cuidado en la vejez: Planificar el cuidado mutuo en caso de enfermedad o incapacidad, y considerar opciones como seguros de salud y servicios de cuidado.

    Crisis No Normativas

    -Experiencias de discriminación: Afrontar situaciones de discriminación en el trabajo, en el vecindario o en otros contextos sociales.

    -Desafíos legales y de derechos: Enfrentar barreras legales en lugares donde los derechos de las parejas homosexuales no están plenamente reconocidos.

    -Problemas de salud críticos: Enfrentar enfermedades graves o crónicas sin el apoyo de una red familiar extensa que pueda proporcionar cuidado.

    -Acceso a servicios de salud inclusivos: Lidiar con posibles prejuicios o falta de comprensión de los profesionales de salud.

    -Pérdida de un compañero: Afrontar el duelo y la reorganización de la vida tras la pérdida de la pareja.

    -Rechazo familiar: Afrontar el posible rechazo o falta de apoyo de la familia de origen en momentos críticos.

    -Adaptación a cambios sociales: Ajustarse a los cambios en la legislación y en la aceptación social de la homosexualidad que puedan impactar sus derechos y calidad de vida.

    Evolución
    1. Inicio de la Relación
    Fase de Conocimiento y Enamoramiento:

    -Exploración: La pareja se conoce mejor, explorando intereses, valores y metas comunes. Se construye una base sólida de confianza y comunicación.
    -Aceptación y Salida del Closet: Ambos miembros enfrentan el proceso de aceptación personal y social, incluyendo la salida del closet ante amigos, familiares y en el trabajo.

    Formación de la Pareja:

    -Decisión de Convivir: La pareja decide vivir junta, lo cual implica adaptarse a la convivencia diaria, compartir responsabilidades domésticas y ajustar rutinas personales.
    -Desarrollo de la Identidad de Pareja: Comienzan a construir una identidad como pareja dentro de sus comunidades, participando en actividades sociales y estableciendo una red de apoyo.

    2. Estabilización y Consolidación
    Establecimiento de una Vida Compartida:

    -Compra de Propiedades o Alquiler de Vivienda: Deciden sobre su lugar de residencia, ya sea comprando una casa o alquilando un apartamento, y crean un hogar juntos.
    -Distribución de Roles y Responsabilidades: Establecen roles claros dentro del hogar, equilibrando las tareas domésticas y las responsabilidades económicas.

    Crecimiento Personal y Profesional:

    -Desarrollo de Carreras: Ambos miembros se apoyan mutuamente en el avance de sus carreras profesionales, tomando decisiones que beneficien a la pareja.
    -Metas Comunes: Trabajan juntos en proyectos y metas a largo plazo, como viajes, inversiones y actividades de ocio que disfrutan juntos.

    3. Mantenimiento y Crecimiento Continuo
    Fortalecimiento de la Relación:

    -Mantener la Comunicación Abierta: La pareja se esfuerza por mantener una comunicación honesta y abierta, abordando cualquier problema que surja de manera constructiva.
    -Apoyo Mutuo: Se apoyan emocionalmente durante desafíos personales y profesionales, construyendo resiliencia y fortaleciendo el vínculo afectivo.

    Vida Social y Comunidad:

    -Participación en la Comunidad: Se involucran en la comunidad LGBTQ+ y en otras comunidades locales, contribuyendo a causas que les importan y construyendo una red de apoyo social.
    -Desarrollo de Amistades: Cultivan amistades y mantienen relaciones cercanas con amigos y familiares que aceptan y apoyan su relación.

    4. Envejecimiento y Preparación para la Vejez
    Planificación Financiera y de Salud:

    -Preparativos para la Jubilación: Planifican su jubilación, asegurando estabilidad financiera para su futuro sin hijos que cuiden de ellos.
    -Salud y Bienestar: Se enfocan en mantener una buena salud física y mental, participando en actividades saludables y cuidando mutuamente de su bienestar.

    Cuidado y Apoyo en la Vejez:

    -Planes de Cuidado Mutuo: Desarrollan planes para cuidarse mutuamente en caso de enfermedades o incapacidades, considerando opciones como seguros de salud y servicios de cuidado.
    -Red de Apoyo Extendida: Fortalecen su red de amigos y posibles cuidadores que puedan proporcionar apoyo en la vejez, en ausencia de hijos.

    Integrantres: Isabella Cortina Oviedo y Nicolas Esquea Arias.

  4. «FAMILIA HETEROSEXUAL QUE NO DESEA TENER HIJOS»
    Las crisis normativas en una familia heterosexual que no desea tener hijos podrían incluir presiones sociales y expectativas culturales sobre la reproducción y la crianza. Esto puede generar conflictos internos y externos al cuestionar las normas establecidas.
    por ejemplo, una crisis normativa para una pareja heterosexual que decide no tener hijos podría ser la presión social de amigos, familiares o incluso desconocidos que constantemente les cuestionan su decisión, lo que puede generar conflicto y estrés en la pareja.

    En cuanto a las crisis no normativas, podrían enfrentarse a la falta de modelos de familia similares en su entorno, lo que podría hacerles sentirse incomprendidos o aislados. Además, podrían experimentar dificultades para encontrar apoyo y comprensión en su elección de no tener hijos.

    Es importante recordar que cada familia es única y puede enfrentar estas crisis de manera diferente. Si necesitas más ejemplos o detalles específicos, estoy aquí para ayudarte.
    Sobre como puede darse una evolución en una pareja heterosexual que no desea tener hijos pudimos concluir que este tipo de familia puede llegar a tener una evolucion significativa en su vida y en su relación. A medida que exploran esta opción, pueden descubrir una amplia gama de posibilidades que les permiten profundizar su conexión y explorar nuevos horizontes juntos.

    Inicialmente, pueden enfrentar preguntas y críticas de amigos, familiares o incluso de la sociedad en general. Sin embargo, a medida que se afirman en su elección, pueden encontrar una sensación de libertad y empoderamiento al seguir su propio camino, lejos de las expectativas sociales tradicionales.

    Con el tiempo, esta pareja puede descubrir una nueva forma de intimidad al enfocarse en su relación de pareja. Al no tener la responsabilidad de criar hijos, tienen más tiempo y energía para invertir en ellos mismos y en su relación. Pueden disfrutar de actividades compartidas, como viajar, practicar deportes, o explorar nuevos hobbies juntos. Esta dedicación mutua puede fortalecer su vínculo y aumentar su satisfacción personal.

    Además, la ausencia de hijos puede brindarles una mayor flexibilidad financiera. Sin los costos asociados con la crianza de hijos, tienen más recursos para invertir en sus propios intereses y metas. Esto les permite disfrutar de un estilo de vida más cómodo y satisfactorio, con la posibilidad de viajar más, vivir en un área deseada, o invertir en su desarrollo personal y profesional.

    A medida que avanzan en su vida juntos, esta pareja puede encontrar satisfacción en contribuir a la comunidad de otras formas. Pueden participar en actividades de voluntariado, apoyar causas benéficas o ser mentores para otros. Esta experiencia compartida de hacer una diferencia en la vida de los demás puede fortalecer aún más su vínculo y brindarles un sentido de propósito compartido.

    En conclusión, la evolución de una familia heterosexual que elige no tener hijos puede ser una experiencia profundamente enriquecedora y satisfactoria. Al centrarse en su relación de pareja, explorar nuevos intereses y contribuir a la comunidad de diferentes maneras, pueden encontrar una felicidad y plenitud que trascienden las expectativas convencionales de la vida familiar.

  5. El blog resalta que los modelos tradicionales del ciclo de vida familiar no incluyen adecuadamente a las familias no heteronormativas. Esto se debe principalmente a que dichos modelos tienden a centrarse en la presencia de hijos, sin considerar que hoy en día muchas familias no desean o no pueden tenerlos. A continuación, presentaremos las crisis a las que se enfrenta una familia homosexual que no puede adoptar o subrogar un embarazo, asi como la evolución que estas familias podrían presentar.

    Las crisis que puede enfrentar una familia homosexual que no puede adoptar o subrogar un vientre pueden dividirse en normativas y no normativas. Las crisis normativas son aquellas que todas las familias enfrentan en alguna medida, mientras que las no normativas son específicas y no necesariamente esperadas o comunes, al ser una pareja homosexual pueden enfrentar crisis específicas derivadas de su orientación sexual y de las particularidades sociales y legales que les afectan. A continuación, se presentan ejemplos de ambas:
    Crisis Normativas:
    1. Relación de pareja:
    La pareja puede enfrentar desafíos comunes como la convivencia, la adaptación a la vida en pareja, la resolución de conflictos y la gestión del tiempo y las finanzas; asi como, adaptarse a los cambios físicos y emocionales que vienen con el envejecimiento y planificar para el futuro en términos de salud y finanzas, pero al ser una pareja homosexual, estarán afectados en gran medida a la presión de conformarse a roles de género tradicionales que no se ajustan a su dinámica de pareja, lo que puede crear tensiones y conflictos internos, al igual que, enfrentarían actitudes homofóbicas en su entorno social, lo que puede llevar a la exclusión, aislamiento y estrés emocional, por lo tanto, al ser blanco de violencia física o verbal, acoso o amenazas debido a su orientación sexual, estas parejas tienen un gran impacto en su sensación de seguridad y bienestar, lo que podría afectar su dinámica de pareja.
    2. Apoyo social y familiar:
    El asegurarse de contar con el apoyo de la familia extendida y amigos es de vital importancia para el desarrollo de una pareja al crear una red de apoyo segura, al ser una pareja homosexual podrían enfrentar el rechazo o la falta de apoyo de familiares debido a prejuicios sobre la orientación sexual, lo que puede resultar en una pérdida de relaciones significativas y apoyo emocional, al no tener una comunidad de apoyo que entienda y valide sus experiencias como pareja homosexual se sentirán en gran medida aislados de la sociedad, que de por si los obliga a lidiar con las expectativas y juicios sobre cómo debería ser una relación o familia, lo que puede generar una presión adicional y conflictos internos en la pareja.
    Crisis No Normativas:
    1. Desafíos legales y sociales:
    Estas parejas enfrentan dificultades en países o regiones donde el matrimonio homosexual no está legalmente reconocido, afectando su acceso a derechos y beneficios que otras parejas disfrutan y en los países donde no se presenta una restricción aún siguen habiendo problemas relacionados con la herencia, derechos de visita en hospitales, adopción de decisiones médicas y beneficios fiscales que pueden estar limitados o negados.
    Estas parejas tienen que lidiar con leyes y políticas que limitan sus derechos, como la imposibilidad de adoptar o utilizar la subrogación, mientras enfrentan la discriminación en diferentes ámbitos, como el laboral, el social y el comunitario, debido a su orientación sexual.
    2. Deseo insatisfecho de paternidad/maternidad:
    Las parejas homosexuales además de enfrentar las barreras físicas y/o biológicas que se les presentan, también les toca afrontar barreras legales para la adopción y financieros para acceder a la subrogación, especialmente en jurisdicciones donde no está permitida o es muy costosa esta práctica lo que afecta su capacidad de tener hijos, sumándole a esto afrontar el dolor y la frustración emocional de no poder formar una familia con hijos, lo que puede afectar la salud mental y satisfacción vital.
    3. Visibilidad y representación:
    Las parejas homosexuales les tocan lidiar con la presión de ocultar su orientación sexual en ciertos contextos para evitar discriminación o violencia, lo que puede llevar a conflictos internos.
    Al tener una falta de modelos familiares similares en su entorno puede generar sentimientos de aislamiento y falta de representación, los que los lleva a afrontar la falta de representación positiva en los medios y la cultura, lo que puede afectar su autoestima y la percepción pública de las relaciones homosexuales, llevándolos a enfrentar la necesidad de educar a otros sobre su realidad y luchar por una mayor aceptación y comprensión.
    4. Impacto en la relación de pareja:
    La imposibilidad de tener hijos puede generar tensión en cualquier pareja, pero, al ser una pareja homosexual lidian con limitaciones biológicas, físicas, legales y sociales, lo que podría derivar en conflictos, resentimiento o una crisis de separación, lo que los llevaría a tener que hacer ajustes en las expectativas y redefinir el proyecto de vida conjunto sin la presencia de hijos, lo que requiere un alto nivel de comunicación y compromiso mutuo.
    En resumen, además de las crisis comunes que cualquier pareja podría enfrentar, las parejas homosexuales deben lidiar con desafíos adicionales específicos relacionados con la discriminación, los derechos legales, la visibilidad y la aceptación social. Estas crisis pueden tener un impacto profundo en su bienestar emocional y en la estabilidad de la relación, haciendo esencial contar con apoyo especializado y una red de apoyo sólida.

    Con respecto a su evolución, podemos presentar que, actualmente se están dando diferentes cambios en el ámbito social, cultural, económico, político y tecnológico, lo cual puede llevar a que este tipo de familia sea aceptada por la sociedad.
    Por un lado, se puede optar por reproducción asistida como la inseminación artificial o fecundación in vitro (aunque no son accesibles para todos) o por las crianzas compartidas con amigos o familiares, creando redes de apoyo, en las que se llegan a acuerdos sobre la crianza, logrando así visibilidad a los nuevos tipos de familia no convencionales.
    Para finalizar, es importante destacar el cambio que lentamente han adoptado diferentes países, esto es un gran avance y el cual da pie a que socialmente podamos mirar más allá de lo socialmente aceptado, dejando así de lado, el rechazo y la discriminación hacia estas personas, pues en la mayoría de los casos la idea de que personas homosexuales estén juntas y adopten es inconcebible.

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