Psicología, Salud

La familia nuclear: ¿un modelo en decadencia?

GLENDIS YULIETH PABON MIRANDA

Visitas totales: 690

Tipos de familia según Engels en “El origen de la Familia, la propiedad privada y el estado”:

1. Familia consanguínea:

Características:

Promiscua, no hay restricciones sexuales entre los miembros.
La filiación solo se reconoce por la línea materna.
Organización en gens, grupos de parentesco basados en la descendencia materna.
Predominio de la caza y la recolección.
Época histórica: Salvajismo inferior.

2. Familia punalúa:

Características:

Se establecen parejas, pero con relaciones sexuales dentro de un grupo determinado.
La filiación se reconoce por la línea materna y paterna.
La gens se divide en subgens.
Predominio de la horticultura y la ganadería.
Época histórica: Salvajismo superior.

3. Familia sindiásmica:

Características:

Parejas monógamas estables.
Predominio del matrimonio por grupos.
La filiación se reconoce por la línea paterna.
La gens pierde importancia.
Predominio de la agricultura y la ganadería.
Época histórica: Barbarie.

4. Familia monogámica:

Características:

Pareja monógama estricta.
Matrimonio individual.
Predominio de la familia nuclear (padres e hijos).
La propiedad privada y la herencia son claves.
Época histórica: Civilización.

Entrada de Blog: Crítica a la evolución actual de la familia

Introducción:

La familia nuclear ha sido el modelo predominante en las últimas décadas, pero en la actualidad se enfrenta a una serie de cambios y desafíos. En este blog, analizaremos la evolución de la familia desde la perspectiva de Engels y expondremos una crítica a la situación actual, con miras a los posibles horizontes que se vislumbran.

La Evolución Contemporánea de la Familia: Una Mirada Crítica Desde la perspectiva de Engels en “El origen de la Familia, la propiedad privada y el estado”, la familia civil o monogámica ha sido el pilar de la sociedad capitalista. Sin embargo, en la era moderna, esta institución ancestral se enfrenta a desafíos y cambios profundos que requieren reflexión y acción. La familia monogámica, tal como la conocemos, ha sido moldeada por normas culturales y económicas que han evolucionado con el tiempo. Sin embargo, en la actualidad, observamos una serie de transformaciones que cuestionan su estabilidad y su relevancia en la sociedad contemporánea. Uno de los principales desafíos que enfrenta la familia monogámica es la diversidad de modelos familiares que emergen en la sociedad moderna. El concepto tradicional de familia nuclear se ve desafiado por familias monoparentales, familias ensambladas, parejas del mismo sexo, entre otras formas familiares que desafían la norma establecida. Además, el papel de género dentro de la familia ha experimentado cambios significativos. Las mujeres han ganado mayor independencia económica y social, lo que ha desafiado la estructura patriarcal tradicional. La división del trabajo doméstico y la crianza de los hijos se han vuelto más equitativos, desafiando así los roles de género preestablecidos. En cuanto a la institución del matrimonio, hemos presenciado una disminución en las tasas de matrimonio y un aumento en las uniones consensuales. Esto refleja una tendencia hacia una mayor flexibilidad y autonomía en las relaciones de pareja, alejándose de la rigidez de las normas tradicionales. Sin embargo, mientras celebramos la diversidad y la evolución de las estructuras familiares, también debemos ser conscientes de los desafíos que enfrentan. La fragmentación familiar, el aumento de la soledad y la falta de apoyo social son preocupaciones que merecen atención. En este contexto, es crucial que la sociedad promueva políticas que apoyen a todas las formas de familia y reconozcan la importancia de la diversidad familiar. La igualdad de género, el acceso a la educación y la protección de los derechos familiares son fundamentales para garantizar un entorno familiar saludable y equitativo

Crítica a la familia nuclear:

Excesiva carga sobre la mujer: La responsabilidad del cuidado del hogar y los hijos recae principalmente sobre la mujer, lo que limita su desarrollo personal y profesional.

Falta de flexibilidad: La rigidez del modelo nuclear no se adapta a las nuevas realidades sociales, como la diversidad de formas de pareja y la necesidad de conciliación laboral y familiar.

Desigualdad social: El acceso a la vivienda, la educación y otros recursos básicos no está garantizado para todas las familias, lo que genera desigualdades.

Horizontes futuros:

Diversificación de las formas familiares: Aumento de familias monoparentales, homoparentales, reconstituidas, etc.

Mayor corresponsabilidad: Distribución equitativa de las tareas domésticas y de cuidado entre hombres y mujeres. Políticas públicas de apoyo: Implementación de medidas que favorezcan la conciliación laboral y familiar, la igualdad de género y el bienestar de las familias.

Conclusión:

La familia nuclear no es un modelo universal ni inmutable. La evolución social exige replantear las estructuras familiares y construir nuevas formas de organización que sean más flexibles, justas e inclusivas.