Considero que una de las herramientas más efectivas para organizar y presentar los contenidos de mi asignatura Práctica Pedagógica Investigativa es la rúbrica analítica integrada en la matriz de alineación. Esta herramienta posibilita relacionar con claridad cada resultado de aprendizaje con la evidencia que debe entregar el estudiante y con los criterios que se usarán para evaluarlo.
Trato de emplearla como eje de la asignatura: cada actividad (planeaciones de clase, diario de campo, portafolio, socialización, etc.) se diseña mostrando su rúbrica desde el inicio. Así, los estudiantes saben qué se espera, cómo deben demostrarlo y con qué criterios serán valorados. Esto vuelve el proceso más claro, porque explicita los niveles de logro; más atractivo, porque les da control sobre su propio avance; y más significativo, porque cada tarea se conecta con la práctica real en aula y con criterios concretos de calidad.