Felicidad ¿Qué sabemos de esta emoción? 

Las emociones en general causan un impacto que puede ir de lo placentero a lo displacentero. La diversidad de emociones que el individuo experimenta pueden facilitar u obstaculizar las acciones que se llevan a cabo.

Haciendo énfasis en la felicidad, tanto psicólogos como filósofos han sostenido que el hombre es egoísta e implacable en su búsqueda por la felicidad y parece ser que el poseerla constituye la motivación última de toda acción humana (Platón y Séneca, citado por Anguas, 1997).

Lo que sentimos cuando estamos alegres, satisfechos y plenos o cuando nos sentimos dichosos o solamente cuando nos encontramos en un estado de bienestar, son las características comunes de lo que llamamos felicidad. Por supuesto estas denominaciones y las distintas definiciones del concepto de felicidad varían dependiendo del individuo, el contexto e incluso la cultura.

“La felicidad depende de nosotros mismos”. Aristóteles (384 a.C. – 322 a.C.). El motivo de la felicidad puede variar en cada persona, pero todos estamos en busca de esta ya sea directa o indirectamente. Ser feliz o estar feliz puede ser ya sea por una autorrealización anhelada o alcanzar alguna meta propuesta a futuro; para algunas personas la felicidad la obtienen cuando ellos mismos le generan felicidad a otros, para “alcanzar la felicidad” tenemos que tener en claro que debemos aprender a conocernos a nosotros mismos y saber que es lo que se quiere. De una u otra forma cada quien tiene su secreto para ser feliz.

Si bien todos hemos experimentado esta emoción y lo que genera tanto a nivel fisiológico como cognitivo, resulta de suma importancia conocer los elementos que abarca, por ejemplo: ¿Qué es en realidad la felicidad?, ¿Por qué experimento determinadas sensaciones cuando estoy feliz?, ¿Qué ocurre en el cerebro cuando estamos felices?, a continuación, hablaremos un poco de esto.

Cuando se habla de felicidad regularmente se tiende a pensar en esta como un estado de gozo o placentero, a lo largo de la historia autores también han buscado definir esta emoción, entre ellos tenemos al filósofo estadounidense Henry David Thoreau (1845), quien definió a la felicidad como “una mariposa, cuanto más la persigues, más te eludirá. Pero si vuelves tu atención a otras cosas, vendrá y suavemente se posará en tu hombro” Thoreau usa esta analogía para referirse a la felicidad como algo que es perseguible y por ende alcanzable. Tenemos también a Sigmund Freud quien veía la felicidad como el resultado de satisfacer nuestros deseos y la evasión de aquello que genere dolor. ciertamente las distintas definiciones de esta emoción convergen en la idea de que la felicidad se caracteriza por aquello relacionado al placer y la satisfacción de los deseos individuales, es imperativo que se tenga en cuenta que la felicidad está sujeta a la subjetividad dado que lo que para unos puede interpretarse como algo positivos para otros no.

Si bien la felicidad es la experiencia del placer de los sentidos, hay una serie de procesos cerebrales que están ligados a esta emoción, o mejor dicho que constituyen la felicidad. En el sistema límbico se procesan las emociones de tal manera que si una conducta produce emociones agradables la almacena en la memoria límbica (el hipocampo) y tiende a repetirla (Latorre, 2019).

De igual manera, la estimulación que se da en los centros de placer del sistema límbico están relacionados con la felicidad, puesto que proporcionan al individuo una sensación gratificante (Carrasco y Sánchez, 2008). Sin embargo, para que la activación mencionada anteriormente se dé se necesita de los neurotransmisores y hormonas. Algunos de los neurotransmisores implicados son la dopamina, la cual según Burnett (2018) es un neurotransmisor que desempeña una amplia variedad de funciones en el cerebro, como la generación de placer y gratificación o recompensa presentes en la felicidad. De igual manera, se encuentran las endorfinas, las cuales son consideradas como las “hormonas del placer y la felicidad”, pues son el vehículo material del placer, la felicidad y el alivio del dolor (Gaona, 2017).

Para la obtención de las imágenes usadas en este blog que tienen la finalidad de evidenciar la expresión facial generada por la emoción de alegría, se les preguntó a un grupo de personas (compañeros nuestros), si podíamos sacarle un par de fotos cuando se se estuvieran divirtiendo. Pues, nos pareció, que de esta forma quedarían más naturales las fotos. Por otra parte, le preguntamos a otro grupo si nos permitian sacarle un par de fotos donde nos mostraran una expresión de felicidad. Pudimos apreciar que como la clasifica Rubin (1974) nuestros participantes entran en la categoría de “sonrisa franca”, con el 2% de activación de los grupos musculares alrededor de la boca, que conlleva a un exposición dental completa inferior o superior.

A tener en cuenta:

Según Hernandez. R (2000) algunos beneficios de sonreír son:

• Protege el equilibrio anímico del individuo.
• Garantiza el equilibrio físico y psicosomático.
• Equilibrio social.
• Refleja adaptación, aceptación, seguridad y gratificación.
• Proporciona un estado de bienestar, calma, serenidad, tranquilidad y optimismo.
• Ayuda a afrontar serenamente las situaciones adversas, contribuye a ver la vida con mayor dinamismo y esperanza.
• Experimentar emociones positivas es una actividad específica de la naturaleza humana debido a que contribuye en la calidad de vida de las personas (Fredrickson, 1998).

Nota al lector: Querido lector, ahora que sabes un poco más del concepto de felicidad y de lo que ocurre en nuestro cerebro cuando nos sentimos felices, me gustaría invitarte a la reflexión, ¿Que es para ti la felicidad?

Autores

• Eliana Morales
• Fabián Castrillo
• Celiana Ortiz
• María Camila Rusinque
• Cristian Bernal
• Tatiana Mantilla
• Lina Usuga

Todas las personas que aparecen en las fotos dieron su consentimiento para mostrar su imagen en esta plataforma.

Referencias

• Palmero, F. (1996). Aproximación biológica al estudio de la emoción. 12(1), 61–86. https://www.um.es/analesps/v12/v12_1/05-12-1.pdf
• Anguas, P. (1997). El significado de bienestar subjetivo, su valoración en México [Tesis de maestría, Universidad Nacional Autónoma de México].
• Burnet, D. (2018). El cerebro feliz: La explicación de dónde se origina la felicidad y por qué. Planeta, S.A.
• Carrasco, E. y Sánchez, R. (2008). Las Facetas de la Felicidad y el Amor: el Pensamiento, el Afecto y la Conducta. Psicología Iberoamericana, 16(1), 28-35.
• Gaona, J. (2017). Endorfinas: Las hormonas de la felicidad. La esfera de los libros.
• Latorre, M. (2019). La felicidad y el cerebro humano. https://marinolatorre.umch.edu.pe/wp-content/uploads/2019/05/86_LA-FELICIDAD-Y-EL-CEREBRO-HUMANO.pdf
• Conrado, N. (2016, July 4). El secreto de la felicidad, según 12 de los filósofos más sabios de la historia. Elconfidencial.com; El Confidencial. https://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2016-07-04/secreto-felicidad-filosofos-nietzsche-kant-aristoteles_1226385/
• Hernández, R. (2000). La sonrisa y su patología. Revista Mexicana de Medicina Física y Rehabilitación , 12 (3), 4. https://www.medigraphic.com/pdfs/fisica/mf-2000/mf003c.pdf

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