Yo nunca es una serie comedia dramática de televisión estadounidense que capitulo a capitulo aborda los dramas de Devi una adolescente india-estadounidense que lidia constantemente con las presiones sociales que les impone la vida escolar. Ella junto con sus dos amigas Fabiola y Eleonor pasan por una serie de situaciones personales, académicas y sociales que requieren el despliegue de todos sus recursos emocionales para afrontar exitosamente la adolescencia e ingresar al mundo adulto preparados con las habilidades sociales necesarias para asumir un rol e impactar positivamente la vida donde pretenden inserir.
La adolescencia entendida como el período comprendido entre la infancia y la adultez, propone una serie de desafíos en tres aspectos principalmente: biológicos, psicológicos y sociales. Desde lo biológico el adolescente experimenta toda una serie de cambios fisiológicos y morfológicos importantes que repercuten en los ámbitos psicológicos y sociales; en lo relacionado al aspecto psicológico el adolescente experimenta una reorganización de sus intereses, resultando normativo que transite por diferentes estilos musicales, de moda e inclusive por diferentes grupos de amigos hasta que encontrar un estilo propio que defina su identidad, implicando esto un aislamiento emocional de sus padres que lo llevará a la conquista de la autonomía emocional y la adopción de una actitud frente a la sociedad. Por su parte, los desafíos sociales invitan al adolescente a la autonomía económica, a la emancipación, que permite que los jóvenes accedan a la condición de adultos (Moreno, 2015). En ese sentido, “Yo nunca” muestra a través de las problemáticas que experimentan sus personajes como se siente un adolescente respecto a la forma cómo se ve a sí mismo, cómo lo ven sus padres, familiares o adultos, y cómo lo ven sus pares… la pregunta es ¿cómo se ve o lo ven frente a qué?
La respuesta no es tan sencilla como se piensa, o al menos no para los padres y docentes de estos adolescentes que constantemente los cuestionan sobre sus decisiones, sobre su forma de vestir, sobre su forma de actuar, sobre sus compañías e intereses. Y el adolescente tiene que lidiar con los cuestionamientos que recibe de su entorno en simultánea con los cuestionamientos internos sobre si es parte o no de un grupo, si lo es entonces se cuestiona por qué lo es y si no qué le falta para pertenecer; se cuestionan sobre sus expectativas a futuro, sobre sus capacidades para asumir la vida y en retribución a los cuestionamientos que reciben también juegan a cuestionar a sus padres y sus formas de proceder.
Los adolescentes viven en una competencia por la popularidad, el reconocimiento y la aprobación llevándolos a iniciar y mantener conductas de autosabotaje para su bienestar psicológico y social. Esta situación se ve en diferentes capítulos, en general Devi “siempre” a diferencia del nombre de la serie recurre a situaciones poco acertadas que la ponen en aprietos con su madre o amigos. En un capitulo, Devi estaba celosa de Anessa una chica nueva en la escuela y creó un rumor acerca de un trastorno alimenticio que resultó ser cierto, todo resultó mal, arruinando momentáneamente su amistad con Fabiola, Eleonor y Ben, pero también tuvo que enfrentar la mirada inculpatoria de su familia y sus docentes; o en otro capítulo Devi mantiene una relación amorosa con dos de los compañeros más populares de su salón, situación que luego la llevo a días de encierro y fuertes cuestionamientos entre los chicos de su escuela, experimentando aislamiento social y culpa. Y esa constante no es exclusiva del comportamiento de Devi, en la temporada 3 episodio 6 Ben sufre un colapso producto de semanas de trabajo duro para poder conseguir el ingreso a una universidad prestigiosa y la aprobación de su padre, eran tan altas sus expectativas que descuido por completo su salud física y mental.
¿Por qué es una serie que deben ver los padres de adolescente?
Durante las tres temporadas que presenta la serie se logran identificar múltiples situaciones que impactan significativamente el comportamiento social de los personajes y la forma en la que son vistos por los adultos, sumándole además las creencias culturales que demarcan un patrón constante en lo que se espera del adolescente. Los adultos juegan un papel fundamental en la trama de la serie poniendo en evidencia que padres y docentes son los responsables de la gestión del comportamiento emocional y social de los jóvenes; en consecuencia el rol de los padres es acompañar y guiar, no controlar, tal como lo expresan Castaño & García (2016) el objetivo “es supervisar e ir reforzando las actitudes positivas y beneficiosas y contrarrestar y modificar las que no son adecuadas”.
Una situación recurrente a nivel familiar en la vida de los personajes es que se valoran poco competentes por parte de los padres para comprender y dimensionar las preocupaciones reales del mundo de los adultos y en general los padres prefieren no contarle a sus hijos adolescentes cómo se sienten frente a las vicisitudes de la vida, además de tomar decisiones que impactan seriamente su futuro sin comentarles o tenerlos en cuenta, lo que genera una sensación de malestar entre los adolescentes sintiéndose poco valorados. En múltiples ocaciones, los padres de Ben, Devi, Aneesa, Paxton, Fabiola comprendieron que sus hijos eran tan capaces de entender el mundo y asumir las consecuencias de sus actos, que sus aciertos y desaciertos eran producto de la necesidad de crecer para conquistar esa autonomía que promete el mundo de los adultos.
Los padres quieren ver a sus hijos crecer y esperan ver ese producto terminado que aportará y transformará positivamente a la sociedad, pero se les olvida que el producto es el resultado de las experiencias de amor, protección y cuidado desde la infancia, crecer cuesta e implica orientar, corregir, sostener e ir soltando, el mayor temor de los padres es que los hijos se salgan de control, porque eso los haría ver como malos padres o incapaces de cuidar a otro ser humano. “Yo nunca” permite una visión del mundo íntimo de los adolescentes, de sus preocupaciones y miedos, de sus relaciones, de sus frustraciones y expectativas de futuro, de las motivaciones en sus malas decisiones y también sus aciertos; es la oportunidad de entender mediante una comedia como sienten, piensan y viven los adolescentes.
Referencias
García, P., Castaño, F. (2016). Aprender a educar. Casos prácticos para evitar el mal comportamiento y el fracaso escolar. Penguin Randon House Grupo Editorial.
Moreno, A. La Adolescencia. Editorial UOC (Barcelona).
Recommended18 dieron "Me gusta"Publicado en Psicología, Salud
Comentarios
me pareció genial el blog, mas porque es una serie que me termine de ver hace un par de semanas y la verdad me gusto mucho porque se puede ver a la perfección en las diferentes situaciones de esta, como piensa un adolescente, el como influye la sociedad y sus criticas en su comportamiento y decisiones, pero también el miedo de los padres a hacer las cosas mal o que su hijo elija un camino equivocado y esta presente en esta etapa. Como comenta la profe wendy muchas veces los padres de estos adolescentes no los tienen en cuenta para la toma de algunas decisiones importantes; se ve reflejado en la serie cuando la madre de Devi estaba tomando la decisión de irse a vivir a la india sin importar los planes o ideales que ya devi tenia contemplados, haciendo que esta tuviera ciertos momentos de tensión sintiéndose frustrada por no encontrar una solución y poder quedarse.
me queda por decir que este ejercicio me pareció muy interesante, porque me hizo cuestionarme, al ver la serie todo el tiempo mencione que era para adolescentes, pero luego de esta lectura pude comprender que en realidad si es una serie para padres de adolescentes ya que facilita de manera dinámica la compresión de la vida adolescente.
Que interesante este tipo de publicaciones e innovador, sobre todo en una sociedad que aún deja de lado el papel fundamental que cumplen los jóvenes en la sociedad.
para nadie es un secreto que los padres o en general adultos, piensan que pueden controlar o incluso imponer ciertos comportamientos en los jóvenes que no van de acuerdo a su crecimiento e identidad, algunas veces no los dejan “ser”, por eso, una vez el adolescente entra en la etapa adulta no se encuentra preparado para los riesgos y beneficios que esto conlleva, no saben aprovechar las oportunidades o simplemente no saben cómo actuar. Es importante que los papás adopten esos roles en dónde más que una cantaleta, un regaño, sean un apoyo, los orienten, que los expongan a situaciones difíciles (aparentemente), se enfrenten a desafios y que sean estos mismos adolescentes los que encuentren los recursos para la resolución de problemas y conflictos.
Es realmente provechoso encontrar este tipo de análisis sobre algunos contenidos mayormente visto por los jóvenes. Debido a que pone los puntos sobre las íes con respecto a esta etapa del desarrollo, especialmente juzgada de ser la fase más difícil de “controlar” por parte de los padres o familiares. Verdaderamente, sería muy oportuno popularizar esta clase de programas ante padres, compartir su contenido desde una perspectiva crítica, que les permita reconocer las situaciones/problemáticas cotidianas que vive el adolescente, los factores que influyen en ellas y las herramientas que como guías pueden proporcionar para un óptimo desarrollo.
Eso lo podemos hacer a través de talleres, invitar a los padres que como actividad familiar vean la serie con sus hijos.
Muy interesante su publicación , creo que es realmente importante que los padres entiendan a los adolescentes y ¿qué mejor forma que hacerlo viendo una serie?; parece que no están conscientes de las situaciones sociales, académicas y personales que nos toca vivir día a día, todos los desafíos que pasamos lo hacemos sin su compañía o apoyo en la mayoría de los casos,, aunque también debería existir comprensión por parte de nosotros ya que muchos creen que sus padres lo tienen todo resuelto y no es así, tienen problemas también , tienen cosas que afrontar, nunca se deja de evolucionar y eso incluye nuevos problemas y retos , si realmente hubiese la confianza para contar muchas cosas entre padre e hijo habrían mucho que sacar de allí ya que como jóvenes también podemos darle una vista fresca de la vida y ellos pueden darnos sus consejos sobre cosas que probablemente ya vivieron o saben cómo lidiar , “vivimos todos bajo un techo para cada quién en su mundo”.
Es precisamente lo que busco con este tipo de publicaciones, pensar en términos de la cotidianidad. Que nuestro saber permita mejorar la relación que establecen los padres con sus hijos adolescentes.
Muy interesante su publicación en Bloque 10 sobre la serie Yo nunca, creo que es realmente importante que los padres entiendan a los adolescentes y ¿qué mejor forma que hacerlo viendo una serie?; parece que no están conscientes de las situaciones sociales, académicas y personales que nos toca vivir día a día, todos los desafíos que pasamos lo hacemos sin su compañía o apoyo en la mayoría de los casos, aunque también debería existir comprensión por parte de nosotros ya que muchos creen que sus padres lo tienen todo resuelto y no es así, tienen problemas también , tienen cosas que afrontar, nunca se deja de evolucionar y eso incluye nuevos problemas y retos , si realmente hubiese la confianza para contar muchas cosas entre padre e hijo habrían mucho que sacar de allí ya que como jóvenes también podemos darle una vista fresca de la vida y ellos pueden darnos sus consejos sobre cosas que probablemente ya vivieron o saben cómo lidiar; “vivimos todos bajo un techo para cada quién en su mundo”.