¿Por qué necesitamos un marco conversacional?
¿Recuerdan cuando hablamos de la “Vacaloca B10”? Ese fenómeno donde cada profesor va por su lado sin un rumbo claro, ni comunicación o colaboración que afecta la experiencia estudiantil. O aquella “falacia del planeación” donde creemos que por explicar mucha información, todos los estudiantes la aprenden (y que entre más contenidos expliquemos, mejor). Adicionalmente, padecemos de adicción a las notas, falta de motivación, falta de propósito, desarticulación, contenidos y cursos atomizados…….. (se entiende la idea, el sistema no está sano). Pues bien, el marco conversacional de aprendizaje viene a poner orden en este caos.
¿Por qué afirmamos que es la piedra clave?
En arquitectura, la piedra maestra o clave es la piedra central de un arco, colocada en la parte superior. Distribuye el peso y mantiene las otras piedras en su lugar. Es crucial para la integridad estructural del edificio. De manera similar, el marco conversacional de aprendizaje actúa como ese elemento central que sostiene y da coherencia a todo el proceso educativo.
Pero, ¿qué es el marco conversacional de aprendizaje?
El marco conversacional de aprendizaje, propuesto por Diana Laurillard (2012), es un enfoque centrado en el estudiante que reconoce que cada nuevo concepto o habilidad debe pasar, en distinto orden, por los distintos tipos de aprendizaje. De lo contrario, corre el riesgo de ser olvidado.
En esa línea, Arrieta et al. (2024) proponen una versión simplificada del marco conversacional con cinco tipos de aprendizaje:
Imaginemos que estamos enseñando a escribir un artículo científico. Según este marco, el estudiante solo desarrollará habilidades profesionales complejas al cumplir con los siguientes aprendizajes en orden intercalado (no lineal):
- Adquirir: escuchar o leer qué es un artículo científico y su estructura.
- Discutir: debatir sobre metodologías y hallazgos con compañeros.
- Practicar: escribir secciones del artículo.
- Producir: crear y publicar el artículo final.
- Indagar: Investigar sobre el campo de estudio específico y relacionarlo con otros.
Es prácticamente imposible tener una experiencia educativa profesional compleja articulada sin colaboración docente. Sin piedra clave no hay arcos, sin marco conversacional no hay conexión educativa. La colaboración es virtualmente inexistente sin la conexión que brinda el marco conversacional de aprendizaje.
Si quieren profundizar sobre esta herramienta de colaboración, pueden descargar el kit de diseño educativo conversacional de Arrieta et al. (2023), que además incluye 12 principios de diseño educativo. Pero eso… es tema para otro artículo. Sin spoilers por ahora.
Reflexiona sobre el marco conversacional de aprendizaje
Apostamos que, como docente, nunca ha tenido una experiencia de colaboración profunda con otro docente en un mismo curso. ¿Están listos para sumergirse en este enfoque revolucionario?
Compartamos y sigamos construyendo juntos esta conversación educativa (¡y que no se diga que la educación es un monólogo aburrido!) Diseñemos menos conferencias, más experiencias conversacionales.
Referencias
Arrieta, M., Meyer M., Villegas E., Aguas, R. (2023). Kit de diseño educativo conversacional. Bloque 10. https://bloque10.unimagdalena.edu.co/kit-diseno-educativo/
Arrieta, M., Meyer M., Villegas E., Aguas, R. (2024). Menos conferencias, más experiencias. Editorial Unimagdalena.
Laurillard, D. (2012). “Teaching as a Design Science: Building Pedagogical Patterns for Learning and Technology”. Routledge.
Comentarios
Se podría hablar incluso de una piedra angular. La primera piedra que, sin importar su tamaño y desde una esquina define toda la posición de una edificación.
Ya existen experiencias educativas sin el uso del marco conversacional de aprendizaje. Pero, con el marco, esas edificaciones son más robustas, complejas, altas, efectivas.